sábado, diciembre 08, 2007

Confuso Inconciente


Dejo que la irracionalidad tome de mí lo que quiera.
Amarre mi lengua.
Vulnere el hálito.
Evitando así, el sufrimiento desnudo y la mala compañía .

Sueño cada día con destronar a los falsos reyes.
Que mienten con recelo y no miran directamente.

Evoco lágrimas negras.
En la proximidad que da la espesura de lo perdurable.
Anoto para no olvidar mi última palabra .
Con ese terror prohibido que genera y de-genera.
Liberando al horizonte de la verticalidad.