Beben de la misma fuente.
Destruyen a la divinidad.
Cavilan entre los faroles de una calle con el tránsito suspendido y las ventanas acorazadas.
Sus provocaciones no dan cabida ni a un sorbo de credibilidad.
Son la personificación de dos cuerpos cansados.
Como si el cansancio no los dejara respirar.
Terminarán bebiendo de distintas fuentes.
Acabarán ...
... aferrándose a la divinidad.
Cuadro :" Cómplices", Juan Luis Baroja Collet.
